Skip to main content
DESPABILATE ⭐⭐⭐⭐⭐

El paralelismo de la devaluación del peso mexicano de 1994 y 2024


A lo largo de los años siguientes, México implementó una serie de reformas para fortalecer su economía y restaurar la confianza de los inversionistas. Sin embargo, la historia parece repetirse en las elecciones presidenciales de 2024, donde una vez más se observa una devaluación significativa del peso mexicano tras el proceso electoral.

Este paralelismo entre 1994 y 2024 destaca las complejidades y desafíos persistentes que enfrenta la economía mexicana. La devaluación del peso no solo refleja problemas económicos subyacentes, sino también incertidumbre política y la necesidad de reformas estructurales profundas. La estabilidad política y la confianza en las instituciones gubernamentales son cruciales para fomentar un entorno económico propicio para el crecimiento y desarrollo económico del país.

El proceso electoral de 2024 en México ha captado la atención tanto a nivel local como internacional. La economía mexicana, una de las más grandes de América Latina, está estrechamente entrelazada con el panorama político del país. Las decisiones políticas y las expectativas sobre el futuro liderazgo tienen repercusiones directas en diversos sectores económicos.

Es interesante cómo ciertos patrones económicos y políticos pueden repetirse en diferentes momentos de la historia. Desde la crisis económica de diciembre en 1994 hasta las recientes noticias de devaluación del peso mexicano en 2024, México ha experimentado paralelismos sorprendentes en su historia económica.

En 1994, la transición política generó un panorama de especulación, donde el capital golondrino desencadenó un efecto dominó. Primero, la retirada de capital provocó desempleo, lo que a su vez redujo la demanda interna y externa de la moneda local. Esta situación afectó negativamente la confianza en la economía y condujo a desequilibrios fiscales y monetarios que ejercieron presión sobre el tipo de cambio. Esto llevó a una pérdida abrupta de valor del peso mexicano, resultando en una recesión severa.

Este año, la fiesta democratica ha resultado en una situación económica similar, con una devaluación del peso después del proceso electoral. A pesar de que la moneda había recibido el nombre de peso fortachón, lo que significa que tenía un valor alto y que era deseable tanto para los inversionistas como para quienes realizan transacciones internacionales, es decir, el peso mexicano estaba apreciado en relación con otras monedas extranjeras; y pese a ello experimentó una caída significativa debido a los resultados de las elecciones.

Esta devaluación ha creado incertidumbre en los mercados financieros, similar a la que siguió a la crisis de 1994, y ha planteado preguntas sobre las políticas económicas y la estabilidad financiera presente y futura del país.

Este escenario político genera un entorno económico menos predecible y más riesgoso. Esto puede conducir a una menor inversión, a un menor crecimiento económico, a un aumento de la volatilidad financiera y una afectación a la confianza de los consumidores e inversionistas en la economía del país.

La devaluación del peso mexicano se atribuye en gran medida al resultado de las elecciones, donde no solo se ganó la presidencia, sino que también se aseguró una mayoría calificada en el Congreso. Esta situación política ha generado incertidumbre en los mercados financieros, llevando a los inversionistas a re evaluar sus posiciones y a retirar inversiones del país, lo que conocemos como capital golondrino.

¿Qué significa una mayoría calificada en el Congreso en términos económicos y financieros? Esta se refiere a una mayoría legislativa que, aunque puede permitir la toma de decisiones más eficientes, también conlleva riesgos significativos. Podría conducir a decisiones legislativas unilaterales, sin el suficiente debate o consideración de alternativas, lo que a su vez podría impulsar políticas económicas radicales o drásticas que carecen de un sólido fundamento o consenso; esto podría ser perjudicial para la estabilidad macroeconómica. Una política fiscal o monetaria inadecuada podría llevar a la devaluación de la moneda, aumentando los costos de importación, elevando la inflación y afectando negativamente el poder adquisitivo de los ciudadanos.


MAS NOTICIAS EN YOUTUBE